martes, 21 de enero de 2014

Entre tú y yo, la nieve, entre tú y yo, el invierno



Te miro a los ojos y el frío ha congelado tus pupilas,
el brillo de mi mirada, hecho escarcha,
entre tú y yo, se fugan las palabras.

Te siento cerca y tu veneno corriendo por mis venas,
y tus manos trepando por mi cuerpo,
y las noches de verano majestuosas
desplegaban sus encantos para nosotros.
Te siento cerca, en el olvido.

Con otro nombre conocimos al odio,
resulta irónico que de amor este viviendo.

Las lágrimas se deslizan, los besos se desarman, 
las caricias cicatrizan, el silencio nos habla.
Entre el alcohol y las cenizas, no se inunda de tu olor mi cama.
Solo la ausencia me abraza cada madrugada.

Tiembla la tinta de mis poemas, 
cuando el llanto de los poetas ha cesado,
cuando tiritan de amor mis manos,
intentando atrapar tu aliento entrecortado.

Solo nuestros cuerpos se desvanecen,
apagan la luz a los recuerdos,
mas el frío no ha congelado los latidos,
ni el anhelo, ni la vida.
Esta vida que sin ti yo no encuentro.

Aunque el olvido se ría de mi, no diré un último te quiero,
a veces las palabras dicen demasiado,
dejaré ahora, que hable el silencio.